Este nuevo largometraje animado centrado en el mundo creado por el escritor polaco Andrzej Sapkowski intenta cumplir con su doble función de calentar motores para la segunda temporada de la serie protagonizada por Henry Cavill y servir de precuela a dicha serie. Y aunque el universo de ‘The Witcher’ es lo suficientemente amplio como para sostener múltiples historias, en distintas épocas y ambientaciones, puede llegar a quedarse algo corta en algunos aspectos para llegar a transmitir la épica y ambición de la serie original.
El guion es de Beau DeMayo, que también trabaja en la serie de imagen real, el resultado mantiene cierto tono común con ‘The Witcher’. Lo que sí se potencia es la acción y la violencia, que adquiere grados de gore importantes.
¿De que trata The Witcher: la pesadilla del lobo?
Es una precuela de The Witcher (año 1263), que ocurre en 1165 y nos cuenta los orígenes de Vesemir, el maestro de Geralt de Rivia y una de las figuras más relevantes para Ciri en el videojuego The Witcher 3: Wild Hunt. La conexión entre Vesemir, protagonista de esta película, y Geralt apenas se toca, incluyendo un cameo fugaz del Lobo Blanco, pero que se centra en la infancia, el aprendizaje y una reveladora misión como adulto del que sería maestro del protagonista de ‘The Witcher’.
Estamos ante un Vesemir mucho más joven, motivado por el dinero y por el deseo de escapar a su destino de criado pobre y miserable. Entre medias no faltará el romance y la redención del personaje hacia unas motivaciones más nobles. Tampoco demasiado, que ya sabemos que un brujo no saca la espada si no es por la pasta.
La película de animación nos mostrará el apogeo de Kaer Morhen, la fortaleza que era el hogar de los Brujos. En el videojuego The Witcher 3: Wild Hunt la vemos casi en ruinas.
Lo que ocurrió en ‘La Caída de Kaer Morhen’
Otro punto interesante para el aficionado a la saga es que en la película se nos narra con pelos y señales, como cayó Kaer Morhen, como los brujos fueron masacrados y cómo escapó Vesemir y se hizo cargo de los que sobrevivieron, lobo blanco incluido. No entran en contradicción con lo narrado anteriormente, pero es de esos casos en los que lo poco que sabíamos y lo que nos habían dejado para nuestra imaginación, resultaba mejor que lo que finalmente nos han mostrado. Aunque he de decir que para los que no se hayan leído las novelas (yo incluida), puede resultar un buen final o al menos aceptable.
