El pasado fin de semana se estrenaba en las salas de cine de toda España ‘Ilargi Guztiak. Todas las Lunas’ dirigida por el director vasco Igor Legarreta. Podéis leer todos los detalles en la crónica que publique. Hoy tenemos el inmenso placer de charlar con uno de los actores principales del elenco, Josean Bengoetxea.
[Valeria Samman] Buenas tardes Josean, muchas gracias por brindarme un poquito de tu tiempo para hablarnos sobre ‘Cándido’ entre otras cosas. Lo que me interesa principalmente contar, es el trabajo que hay detrás de este maravilloso proyecto, dado que creo que hoy en día en general se consume muchísimos productos audiovisuales y los espectadores no siempre son conscientes del trabajo qua hay detrás.
[Josean Bengoetxea] Hola, buenas tardes. Está muy bien, nosotros mismos a veces, no nos acordamos todo lo que llevamos encima, pero empiezas a mirar atrás, dice puff.
EL GUION
[V.S] Por ese motivo me gustaría saber, ¿Qué fue lo que te llamo la atención del guion?
[J.B] Sí, yo ya había trabajado en el primer largometraje de Igor. Entonces ya se había establecido allí una relación en la cual, me brindaba la confianza y el deseo de volver a trabajar con él.
Luego me mandó un guion, y yo me lo empecé a leer antes de coger un avión de Madrid a San Sebastián y me lo terminé arriba del avión. De hecho, me saqué alguna foto. Digo, esto tiene que ser para la posteridad. La verdad es que me sedujo y me atrajo mucho a nivel personal, el personaje. Es un campesino con toda la nobleza que tiene esta gente del campo. Y sin más ambiciones en las que, trabajar la tierra y crear una familia.
Por descontado, lo que sabemos de este personaje es que pierde eso que supuestamente ha construido, que es todo el lado afectivo suyo, su mujer y su niña. Y desde luego por encima de todas estas cosas es el guion, la historia, el relato, el cuento toda la narración. Me pareció un viaje muy profundo al alma. Muchas preguntas existenciales que yo por lo menos me sigo haciendo, con respecto a la muerte, a la vida y todo eso.
[V.S] Pero ¿ha habido algún punto en concreto en el que hayas leído el guion y hayas pensado “tengo que hacerlo”, algo que te haya marcado al leerlo?
[J.B] Bueno, ahí se plantean preguntas muy concretas, con respecto al sentido de vivir que yo lo llevo así, seguramente otro lo hubiera vivido de otra manera, en ¿Qué hacemos?, ¿Qué sentido tiene estar en este mundo, estar en esta vida?
Y le llega la respuesta en forma de una niña que aparece por ahí, que ni siquiera es su propia hija. Y a mí eso me disparó porque otra vez vuelves a conectar con las cosas sencillas. De hecho, no voy a desvelar mucho, pero hay un momento en que al final de su parte en la película habla de dónde está el paraíso, de que puede estar en una mano y esas cosas sencillas, a mí de verdad me reverberan, me crean una revolución como se la crearon al personaje también.
[V.S] Sinceramente considero que ha sido mágica, la he podido visualizar varias veces y me ha parecido increíble. Realmente creo que es una película que te atrapa, con cierto halo de misterio y una profundidad en la historia que da para verla en más de una ocasión. En resumen, me parece increíble, no puedo definirla de otra manera.
[J.B] Jo Valeria, muchas, muchísimas gracias de verdad. Hay mucho detrás, o sea, ya que antes has empezado preguntando que es la dureza del rodaje y a mí se me mueven muchas cosas. Me emociona muchísimo lo que me cuentas. Lo que importa es que al final pueda conectar, pueda llegar, todo este corazón que hemos puesto. Aparte de todos los profesionales, lo técnico y todo el trabajo que hay.
‘CANDIDO’ EL PERSONAJE
[V.S] Y adentrándonos ya un poco en el personaje que interpretas Josean, este hombre humilde de campo llamado “Cándido”, ¿Cómo lo preparaste? Teniendo en cuenta que, a las cuatro semanas de comenzar el rodaje, tuvieron que paralizarlo por la situación de pandemia.
[J.B] Es curioso, si te digo la verdad todos tenemos nuestro propio librillo, nuestro maestrillo, nuestra técnica, en muchas veces hasta secreta y, a veces algo inconsciente, algo intuitivo. En este caso, a veces enseguida entiendo por dónde tiene que ir mi trabajo, que es en lo que tengo que esmerarme y en este lo tenía clarísimo, yo tuve que adelgazar unos cuántos kilos para el personaje en su día, también trabajé en la parte de especial que es algo también como una ropa, que es el idioma que utilizamos, es un dialecto de una zona en concreto.
El contacto con la condición del medio rural también, pero aquí lo importante era la relación con la niña y hasta que no estuviera con ella, yo creo que no podía hacer un trabajo previo, entonces para mí, el trabajo más importante era el conectar con ella lo más profundamente que pudiera, y eso se dio de una manera mágica. La chavala no es un monstruo en la película que decimos, pero es un monstruo en la vida, de verdad es para comérsela. Es generosa, valiente, inteligente, es sensitiva y, quizás esto no sea muy ortodoxo, pero me dices ¿Cómo te preparaste al personaje? Es que todo me lo dio ella y, a partir de que nos conocimos, se creó un vínculo que es el que creo que se refleja en la película.
Josean Bengoetxea caracterizado como ‘Cándido’
LA NIÑA
[V.S] Se nota mucho, se ve el potencial que tiene para su edad. El cómo logra que te sumerjas en lo que le está ocurriendo, es brutal.
[J.B] Es brutal. Aparte del magnetismo que tiene ella. Con la imagen, hay algo que, a los niños, les cuestan captar y entender cuál es el trabajo del actor o de la actriz, que es a que se tiene que dedicar aquí, pues tuvo la maravillosa ayuda de Igor el director y del equipo de Coach comandado por Laia Ricard. Que estaban constantemente con ella, pero ya es un diamante en bruto al principio cuando empieza la película, pero fue capaz de entender perfectamente que era lo que tenía que hacer, cuáles son las herramientas que tienen un actor o una actriz a la hora de trabajar. El salto de aprendizaje en ella fue bestial porque da muchísimos matices diferentes a la película, muchas emociones diferentes a las que ella no está para nada acostumbrada, aunque haya trabajado en teatro en el colegio y tal. De hecho, estamos comentando por ahí. Ella en principio no quería hacer la película, ella acompañó a otras amigas, a hacer el casting y tal.
[V.S] Se nota sobre todo en la evolución que hace su personaje (la niña) durante el desarrollo de la historia, la relación que comienza teniendo con el personaje de ‘Cándido’ y como se va desarrollando, sin realizar un solo gesto que te saque de la película.
[J.B] Ya, que te despisté. Hombre, tuvimos la suerte ahora que recuerdo de rodar muchas cosas casi en continuidad, por tanto, esta evolución se fue dando. Tuvimos esa suerte, por localizaciones y tal algunas cosas no se pudieron del todo, pero aun así es un lujo cuando tenemos a mano esa posibilidad.
UN RODAJE EN PLENA PANDEMIA
[V.S] Al mes de comenzar el rodaje ocurrió la pandemia y no me puedo imaginar lo que habrá sido vivir toda esa situación…
[J.B] Eso fue un cataclismo para el mundo entero, pero para nuestra película en particular fue EL cataclismo. Yo siempre cuento la parte más amable de la historia, que es que él, una vez que retomamos.

Una vez que retomamos hubo un núcleo de 7 u 8 personas, entre ellas la niña, Igor y yo junto con la coach que nos auto confinamos. Estuvimos 12 días en un caserío, eso acabo por disparar el vínculo que teníamos la niña y yo, amén de muchísimas más cosas, por qué además íbamos a las localizaciones con el director de fotografía. Y ahí podíamos hacer nuestros propios ensayos cuando exponía la cámara. Éramos un equipo muy reducido. Había mucha intimidad. Comíamos y cenábamos juntos poco más, no hacíamos muchas más cosas juntos, pero en un entorno bastante … iba a decir paradisiaco, pero es más bien rural, que le venía muy bien y eso para mí fue fabuloso. Pero no respondo a tu pregunta por qué yo creo que esa parte la sufrieron más el equipo técnico.
[V.S] Pero como actor ¿hubo alguna diferencia al rodar antes y después de que ocurriera la pandemia?
[J.B] Yo no sé si ahora me toca contar toda la parte amable, pero lo que recuerdo es que la pasión con la que arrancamos, o sea, las ganas, si es que no se notaba … Ufff que era cómo salir de la cueva, del infierno casi de las ganas de compartir y eso se vivía, estábamos con la sensibilidad a flor de piel, como hemos estado a través de los tiempos y los meses, incluso para el lado contrario, en la sensibilidad y queríamos todos vivir, vivir ahora también queremos vivir, pero desde entonces se han vivido situaciones un poco más conflictivas, pero ahí queríamos salir de la cueva todos y qué mejor haciendo lo que más amas entonces ahí hay una química, y yo igual estoy un poquito romántica también, pero bueno.
EVOLUCIÓN DEL PERSONAJE POR JOSEAN BENGOETXEA
[V.S] Es como tú lo has vivido, es la experiencia que has tenido como actor con todo lo que ha ocurrido. Volviendo un poco a tu personaje, ¿Cómo ha sido para ‘Cándido’ la irrupción repentina de está niña tan misteriosa, en su vida?
[J.B] Bueno ‘Cándido’ es un personaje que vive con muchísimo dolor y supuestamente es la fe la que puede salvarlo, le han educado en esa dirección, es lo único a lo que se puede agarrar para no dejar ya de existir en esta vida de alguna manera. Él no se despidió como quiso de su hija, y vive solo y con dolor, no queriendo ya relacionarse con el mundo.
Y Esta niña lo que provoca cuando aparece es desestabilizar completamente su status quo, de hecho, él no quiere lógicamente saber nada después de lo que le ha pasado, la niña insiste y lo que provoca en un momento es una catarsis dentro de Cándido, que es un campesino del mundo rural vasco y quizás como símbolo de algo de lo que somos nosotros, de nuestra forma de ser, es alguien de otra época, educado y que convive en una sociedad muy cerrada, en la que la Iglesia tiene una influencia muy, muy grande. Él no está acostumbrado a expresar sus sentimientos y la niña lo que provoca es una catarsis, es una liberación y una conciencia de en donde hay que poner el foco, que es en el dolor.
Como he dicho antes, ¿Dónde está la solución a estos estos dolores? a vivirlos, a poder expresarlos. Llega un momento que ya se verá en la película, en donde él tiene su propia catarsis. De repente conecta con lo que la niña le ofrece, de una manera violenta, como no puede ser de otra manera, después de haber llevado toda su vida como lo ha llevado. Finalmente, la niña lo que haces liberarlo. Es la niña la que está buscando la luz en él y es el quien encuentra a dios.
[V.S] Totalmente, se nota en la evolución que hace el personaje a medida que avanza la historia, y creo que el clímax lo hace en esa escena final, tan emotiva.
[J.B] Sí, bellísima. Además, recuerdo muy especialmente ese momento porque era ya te digo que fue rodado más o menos en continuidad. Era mi final en como actor en la película, mi despedida de la actriz, del equipo, era muy emocionante, muy, muy emotivo.
UNA DECISIÓN DIFERENTE
[V.S] Me imagino. Ya para finalizar, ¿Qué hubiera elegido Cándido si hubieras estado en el lugar de la niña cuando aparece el supuesto ángel?
[J.B] Mira que bien esta pregunta, porque que bueno que a Cándido le pasa al revés, porque él hubiera querido acabar ahí y liberarse de ese dolor de esa manera. Pero afortunadamente eso no sucede. Sucede otra cosa.
[V.S] ¿Y a ti como Josean? ¿Qué hubieras elegido?
[J.B] Ay Valeria. Ay, oh, mira si me aparece un Ángel como Itziar Ituño, así vamos, yo me voy con ella, ya que me has preguntado, pues ya te digo. Yo trabajaba ya, esta es mi tercera o cuarta película con Itziar Ituño, pero bueno, hablando del personaje que representa. Sí, seguramente. Pero yo necesito cambios y si me aparece un Ángel, me voy con el Ángel. Que me lleve donde quiera, ya lo que he vivido aquí, ya me aburre un poco. Yo me dejo llevar.